-
-
La gestión de la fauna urbana es esencial para controlar la población de las diferentes especies animales que conviven con las personas en el municipio y ciudades y para prevenir la transmisión al hombre de las variadas enfermedades de las cuales pueden ser vectores.
Ratas y ratones, cucarachas, palomas, chinches, cotorras y mosquito representan un problema de salubridad de las calles de la ciudad que los Ayuntamientos tienen que atajar «de forma activa» cuando se detecta el brote.
Estos animales pueden ser vectores transmisores de enfermedades como la salmonella, la listeria, la toxoplasmosis o infecciones por escherichia coli. Las ratas también pueden portar enfermedades como la fiebre hemorrágica o el ántrax, y las cucarachas pueden causar gastroenteritis, disentería o hepatitis.